martes, 21 de junio de 2011

¿QUIERES SER HIJO O PRÍNCIPE?

Hagamos una pequeña reflexión. (cualquier similitud con la realidad, es pura coincidencia. Lo digo de veras, es un llamamiento para que TODOS reflexionemos en algo).

¿no será que estás creyendo prioritario algo que tu crees que así debe de ser? ¿e ignorando lo que verdaderamente Dios te esta diciendo que es la prioridad?

A veces creemos, que con nuestro Padre, podemos hacer las cosas " a nuestra manera".  Y en parte es verdad, porque disponemos del libre albedrío. Ahora bien, el problema viene, cuándo queremos recibir, recibir, recibir, recibir, sin dar, y dar, y dar, y dar, y dar y dar y dar.    Es decir, queremos orar y que los enfermos se sanen, queremos resucitar muertos, queremos hablar lenguas, queremos profetizar, queremos echar fuera demonios,  queremos hacer todo lo que La Palabra dice que nos "corresponde" por ser hijos de Dios, pueblo de Dios, olivo injertado. Queremos dar frutos, queremos prosperar económicamente, espiritualmente, hacemos nuestras todas las promesas.   Queremos ser como ese árbol del Salmo 1

"Es como el árbol
    plantado a la orilla de un río
   que, cuando llega su tiempo, da fruto
      y sus hojas jamás se marchitan.
      ¡Todo cuanto hace prospera!"        (NVI)

Ahora viene la segunda parte.
¿Haces todo lo que Dios quiere que hagas para poderte beneficiar de todas estas cosas?
                 En la vida de un cristiano, hay básicamente dos caminos.
1. Mantienes tu salvación, oras antes de comer a veces, oras metido en la cama cuándo te vas a dormir, vas a la iglesia los domingos. Tienes conciencia de los que es el pecado, por lo cuál, "intentas"  llevar una vida en santidad. Lees la Biblia dos veces a la semana, o tres o veinte versículos todos los días.  Y sin embargo queremos que Dios, bendiga todo lo que hacemos. No ofrendas NADA a nuestro Padre, salvo unas horitas a la semana, no servicios a nuestro Señor, no  más de 10 minutos de devocional, y mejor, no hablar de ofrendar económicamente.....  Queremos un Dios a nuestra medida, y eso no puede ser,  bueno, si puede ser, pero luego no podemos reclamar que que está pasando que no "crecemos".

2. El segundo camino, ser ese árbol del Salmo 1. ¿como?   Propiciando que "llegue nuestro tiempo".   ¿como?        Esto se responde con una pregunta.  ¿Quieres vivir la vida maravillosa que Dios tiene para ti?     PUES COMIENZA A OBEDECERLE Y SERVIRLE, y llegará tu tiempo, serás fuerte porque creciste en la orilla del río, azotado por las corrientes, tus raíces estarán bien cimentadas y agarradas, y comenzarás a dar frutos, y frutos, y frutos, y frutos, y primeramente lo verás en tu vida, nunca te marchitarás y todo, absolutamente todo lo que hagas, prosperará.

Este segundo camino no es fácil, nadie ha dicho que sea fácil. A mi, no me resulta fácil; es muy sencillo, eso si, pero no es fácil.   A ninguna persona le resulta fácil, renunciar a uno mismo, para ser quien Dios quiere que seamos. Es una batalla diaria y constante.  Y la mayoría de las cosas no nos gustan, y es más, cuando las "descubrimos" intentamos buscarle "la vuelta" , e intentamos justificar con un montón de sandeces que "están bien" , para no dejar de hacerlas.   Voy a poner ejemplos, para entendernos.

- Vivir en pareja y no casarnos.
    Excusa común: "Yo le soy fiel, el es como si fuera mi marido/esposa, aunque no hayamos firmado ningún papel. Dios sabe que nos amamos y respetamos. Además me perjudica en esto o en lo otro."
   Realidad: 1 Corintios 6:18 "Huid de la fornicación. Cualquier otro pecado que el hombre cometa, está fuera del cuerpo; mas el que fornica, contra su propio cuerpo peca."      (FORNICACIÓN: Según Diccionario Bíblico: del griego «porneia», primariamente fornicación, cualquier práctica sexual fuera del matrimonio, y también, figuradamente, idolatría, apostasía, etc.    //    Según RAE: 1. Tener ayuntamiento o cópula carnal fuera del matrimonio.)
   Conclusión: Cometemos iniquidad, intentamos hacer a "un dios a medida",  cuando Dios hay solo 1, Único, Todopoderoso, Real, que responde las oraciones del justo y mira de lejos al altivo, al rebelde.   Un Dios, que nos lo da ABSOLUTAMENTE TODO, si lo obedecemos.

-Zarcillos: (mm.....me voy a meter en camisa de once varas.... ;)  )   .
    Excusa común: La Biblia no deja específicamente claro si se puede o no.
    Realidad: Hay referencias Bíblicas, que nos señalan que no perforemos nuestro cuerpo, y otras muchas, que nos enseñan que "significan" estas perforaciones, y absolutamente todas tienen un significado espiritual contundente, desde un zarcillo en las orejas, como perforaciones en las manos, que se ven hoy en día entre el mundo. Pero sería muy, muy largo de explicar, así que me centro en los tradicionalmente zarcillos en las oreja (en el caso de los hombres.... con las mujeres es otra cosa...).

    Primero vemos una cosa en Éxodo 21:6 "el amo lo hará comparecer ante los jueces, luego lo llevará a una puerta, o al marco de una puerta, y allí le horadará la oreja con un punzón. Así el esclavo se quedará de por vida con su amo."  (NVI) Era símbolo de esclavitud.
   Levítico 19:28 " el amo lo hará comparecer ante los jueces, luego lo llevará a una puerta, o al marco de una puerta, y allí le horadará la oreja con un punzón. Así el esclavo se quedará de por vida con su amo."  (NVI) Aquí podemos observar el uso pagano, aunque no lo hagamos con ese fin hoy en dia, el origen es pagano.   Lo mismo pasa con el árbol de navidad. Por supuesto que en la Biblia no pone "no adornes un árbol para celebrar el nacimiento del Señor Jesús" , igual que no dice "no te pongas zarcillos". Pero nos basamos en que todo este tipo de cosas, no han nacido de la fé, han nacido "del mundo", se hacían entre los paganos, se hacía en todo tipo de rituales de brujería y culturas paganas, insisto con lo de paganas, porque en el mundo occidental, se han introducido, directamente de este paganismo, de las culturas indias y egipcias, y son prácticas incluso de idolatría, y para esto si tenemos principios:

 Romanos 14:23 "...y todo lo que no proviene de fe, es pecado."

 Levítico 18:30 "Guardad, pues, mi ordenanza, no haciendo las costumbres abominables que practicaron antes de vosotros, y no os contaminéis en ellas. Yo Jehová vuestro Dios."

 Romanos 12:2 "12:2 No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta."

Y, hay algo que se nos olvida a menudo, y es que no nos pertenecemos, nuestro cuerpo no es nuestro....

 1Corintios 6:19-20 "¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros?  Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios."
 
Conclusión General:   ¿que quieres recibir de Dios, cuándo te cuesta tanto deshacerte de estas pequeñas cosas por Él?  Debemos vivir conforme al espiritu, y no conforme a la carne.

 Si no quieres renunciar del todo, a las cosas de este mundo, muy bien, cada uno es libre, pero, responde algo, y esta frase no es mía, es una pregunta que me hizo el pastor hace unas semanas:  ¿que quieres ser,  hija o princesa?

Ahora te lo pregunto yo a ti:
¿QUE QUIERES SER, HIJO/A O PRINCIPE/PRINCESA?
Dios te bendiga!!!!!!!!!!!!

3 comentarios:

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